Raimundo Sarriegui 1838-1913

Hoy conoceremos un poco más la vida de Raimundo Sarriegui, un nombre que está íntimamente relacionado con una fiesta tan popular en Gipuzkoa como es la Tamborrada.
Si buscamos los inicios de la tamborrada debemos ir hacia atrás en el tiempo y remontarnos al año 1597. Aquel año se produjo una epidemia de peste en Pasajes de San Pedro. Muchos donostiarras acudieron en peregrinación a la Iglesia de San Sebastián en el Antiguo rogando por la protección del santo. Aquella iglesia se encontraba extramuros en el actual barrio de El Antiguo. La epidemia remitió y en agradecimiento los vecinos hicieron el voto perpetuo de tomar a San Sebastián como patrón de la ciudad y celebrar anualmente, el 20 de enero, su festividad. El carácter religioso originario de la fiesta no se ha perdido totalmente, ya que aún hoy en día se celebra una solemne misa en la Basílica de Santa María del Coro el 20 de enero, pero se trata ya de un elemento religioso puntual en la fiesta.
El protagonista musical de este evento, Raimundo Sarriegui nació en Donosti en 1838 en el Caserío Echeverriene, en Egia durante la primera carlistada. Tenía una bonita voz por lo que ingreso como niño cantor en la capilla de San María. Posteriormente sería tenor de la capilla de San Vicente. Realizo sus primeros estudios en las Escuelas Públicas, situadas desde 1829 en la actual Plaza de Sarriegui ampliando sus estudios en la Escuela Oficial de Comercio.  

Raimundo Sarriegui no salió del circuito de las murallas donde todo era muy familiar y todos se conocían. Participó como cantor en las comparsas y fiestas más diversas y se impregnó del espíritu popular musical de Donostia. También recibió lecciones de violín, piano y guitarra.
Ante la imposibilidad de tener un salario digno con la música- el ejercía de cantor, compositor e interprete opto por opositar al puesto de Corredor de comercio. Este trabajo lo compagino con su labor en la escuela de música fundada por el Ayuntamiento donostiarra en 1877. Es evidente que la personalidad que rodea a la figura de Raimundo Sarriegui se debe a la aceptación de su música por los donostiarras. Es por tanto primordial advertir que todo se debe a que él recogió como nadie el espíritu festivo donostiarra y lo trasladó a su gran número de partituras, que se siguen interpretando cada año en el día de San Sebastián. También participó en el movimiento teatral de la ciudad como autor con la tonadilla o intermedio cómico-lírico Petra, Chardin Saltzallia Gaztain saltzailea y la zarzuela en un acto Pasayan.
Escucharemos :

  • Marcha de San Sebastián
  • Diana
  • Polca
  • Iriyarena
  • IMarcha de San Sebastián con el Orefeón Donostiarra y texto de Serafín Baroja

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